Falta de atención a las obligaciones, despreocupación por la higiene o por la forma de vestir, distanciamiento y fragmentación de la familia son algunos de los síntomas de la adicción a las nuevas tecnologías y en este aspecto los jóvenes son el prototipo de persona más vulnerable. Un 10% de los jóvenes occidentales es adicto a los videojuegos, teléfonos móviles, Internet, o cualquiera de las tecnologías más novedosas que anegan el mercado. Al menos ésta es una de las principales conclusiones a las que se ha llegado durante la jornada "Las nuevas formas de adicción" organizda por el Hospital Sagrat Cor, Serveis de Salut Mental de Martorell donde se ha dado a conocer una nueva realidad sobre las adicciones.No sólo se dan casos del temido "enganche" a sustancias tóxicas (drogas, alcohol, etc.); un nuevo problema se le presenta a la sociedad del siglo XXI: la adicción a las nuevas tecnologías. Este tipo de herramientas pueden llegar a ser muy útiles en todos los aspectos de la vida siempre que se sepan utilizar de forma responsable pero también pueden convertirse en un problema grave para las familias. Es una tarea de toda la sociedad el que los menores y jóvenes aprendan a consumir nuevas tecnologías y la mejor forma de empezar sería mediante la supervisión paterna. Las nuevas tecnologías no son un juguete. Haz que los más jóvenes entiendan esto.
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